Lo mejor la ubicación, junto a la ópera al lado del puerto muchos servicios alrededor. Cama cómoda y limpia, toallas limpias. El hotel es tranquilo, aunque parte del exterior es bullicioso por su cercania al puerto y terrazas, fuimos en festivos, hay más ruido. El balcón tiene un buen cerramiento que aísla mucho el ruido. No había aire acondicionado y tuvimos que abrir, nos comieron los mosquitos y el ruido nos despertaba. La segunda noche mejor, compramos loción antimosquitos y enchufe e hizo menos calor. Parece que están reformando y habrá aire acondicionado más adelante. Habitación y baño pequeños, pero con TV, secador, frigo, mesa y mesillas. Tiene una escalera para acceder empinada y estrecha. Si tuviera aire acondicionado le ponía un 8